Fuente: laopinioncoruna.es.- Una victoria separa al Liceo de ser campeón de la OK Liga después de veinte años y de siete tiros al palo, cuatro de ellos de forma consecutiva. Los números y la estadística apuntan a los verdiblancos, pero no solo eso. Algunos de los técnicos con más prestigio del hockey nacional también creen que el conjunto coruñés tiene todo a su favor. Carlos Figueroa, que no necesita presentación, Fernando Pujalte, técnico del Vic, Juan Copa, que acaba de ascender al Cerceda a la OK Liga, y Guillem Cabestany, entrenador del exitoso Vendrell que este año consiguió el doblete de Copa del Rey y CERS, no dudan en el que el Liceo es el merecedor del título. Por juego y por superioridad física. Pero sobre todo, por su regularidad.
«La mejor cualidad que ha tenido este año el Liceo es la regularidad. Es un equipo muy sólido que ha sacado partidos de pistas muy complicadas. A pesar de que no tenía la vitola de favorito ha demostrado poco a poco que se ha hecho merecedor de esta liga», analiza Carlos Figueroa. Fernando Pujalte, en cambio, subraya el carácter ofensivo de los jugadores dirigidos por Carlos Gil. «La apuesta de juego ofensiva que tiene el Liceo es su principal virtud. Ha conseguido un juego que, por desgracia, hoy no se lleva mucho, pero también una solidez defensiva. Sin ser un equipo con una gran defensa, es capaz de defender a alto nivel robando muchas bolas y cogiendo muchas contras», explica.
«Para mí, aparte de la calidad de sus jugadores, donde el Liceo muestra más superioridad es en el aspecto físico», aporta Guillem Cabestany, que vistió la camiseta verdiblanca en la temporada 1997-98. «Creo que es el equipo que físicamente está más fuerte y a lo largo de la temporada y de los partidos se nota. Me da la sensación también de que es el equipo más profesional de los 16 que hay en la OK Liga», continúa, aunque reconoce que no se puede vivir solo del aspecto físico, por lo que resalta la capacidad del entrenador de conseguir que todos ellos «rindiesen a su máximo nivel». Juan Copa, que conoce bien la casa liceísta, no centra solo el éxito de los verdiblancos a esta temporada, sino a un ciclo en el que cada año el club supo «rearmarse» después de perder jugadores.
«Eso es muy importante y lo valoro mucho», dice el técnico del Cerceda, para el que el Liceo es «el mejor equipo» en el sentido de que es el que mejor juego hace: «vertical, ofensivo, pisa mucho el área», enumera entre sus cualidades. Para el coruñés, la columna vertebral de la plantilla son «Xavi Malián, que cada partido se supera, Jordi Bargalló y Josep Lamas», aunque también destaca a los que les secundan: «Es gente con una media de edad muy buena y que cada vez aporta más al equipo, como es el caso de los dos argentinos -Matías Pascual y Lucas Ordóñez-, Eduard (Lamas), que ha crecido una barbaridad, y Toni Pérez, que es un auténtico killer. Esta suma de cosas pueden desencadenar en el título de liga».
Ahora solo falta rematar con una victoria en Lleida. «Esto es como los partidos de tenis, que el último punto es el más difícil. Tiene que superar esos nervios», señala Figueroa. «Es una cuestión de personalidad y carácter para aguantar la presión en estos momentos», le secunda Pujalte. «Puede ser la pequeña duda que le entre al Liceo, a ver si sabe convivir con ella», se pregunta Cabestany, que se responde a sí mismo: «Si están a estas alturas en esta situación tan favorable será porque han sabido llevar bien la presión. Tengo la sensación de que Jordi Bargalló y Josep Lamas, los veteranos del equipo, han conseguido una fortaleza mental que va a hacer que el resto del equipo les siga». Por eso los cuatro apuestan por un Liceo campeón de liga. «No me cabe ninguna duda», sentencia Copa. «Tengo la sensación de que no va a dejar escapar esta oportunidad», dice Cabestany. «Sería muy extraño que ahora pinchara», añade. Pujalte también se escuda en la regularidad de los coruñeses para hacer su elección. «Ya toca», dice el también exjugador, miembro del último Liceo que consiguió el título liguero, en la 92-93. «Además es de justicia. Su apuesta ha sido superior a la del Barcelona». «Por la trayectoria que ha tenido toda la temporada es el que se merece ganar. Pero el deporte a veces no es justo», concluye Figueroa.