Fuente: hoqueipt.com.- El arbitraje del último clásico entre el Benfica y el FC Porto, que terminó con el triunfo de los encarnados por 4-3, motivó bastantes protestas por parte de los responsables blanquiazules. Guillem Cabestany, entrenador de los dragones, fue el primero en mostrar la indignación apenas acabó el juego. «La mayor vergüenza a la que asistí en toda mi vida en una pista de hockey sobre patines. Una vergüenza para el hockey sobre patines, estropeó el mayor espectáculo», afirmó el técnico catalán.
Este lunes fue el turno de la directiva del FC Porto, que emitió un comunicado quejándose de la calidad de los arbitrajes en el hockey sobre patines, pero también en el baloncesto y fútbol. Los dragones amenazan con tomar medidas drásticas.
«El FC Porto lamenta que las principales competiciones deportivas nacionales estén siendo condicionadas por arbitrajes de mala calidad y, en algunos casos, por arbitrajes en cuyos criterios sólo logramos vislumbrar la intención de perjudicar nuestras equipos», se lee en el comunicado de los blanquiazules.
«El FC Porto considera que los órganos federativos tienen la responsabilidad de tomar las medidas para que los arbitrajes como los que han ocurrido reiteradamente no vuelvan a suceder, de lo contrario podríamos tomar medidas drásticas, pero seguramente las únicas que permitirán al FC Porto no estar involucrado en competiciones cuya verdad deportiva no está salvaguardada».